Llega la Navidad y con ella, una serie de cambios que nos afectan a todos en diversos aspectos. Es una época distinta, con ciertos componentes tanto a nivel cultural, como familiar, que nos exige adaptarnos. Entre estos cambios hay muchos positivos como las vacaciones, celebraciones, descanso, planes… Sin embargo, todo cambio, por pequeño que sea, puede perturbarnos.
En Instituto Centta creemos que una Escuela de Padres enfocada en este objetivo puede resultar de ayuda a todos. Queremos responder a todas vuestras preguntas y preocupaciones.
Los problemas que suelen surgir en esta época están, principalmente, relacionados con factores alimenticios, familiares y culturales.
Para comenzar, hay una mayor exposición a ciertos alimentos “prohibidos” que el resto del año están restringidos, los “alimentos de temporada”, bombones, polvorones, turrones y dulces en general que causan mucha ansiedad a una persona con este trastorno.
Además, si analizamos la herencia cultural, la mayoría de planes a nivel social o familiar giran entorno a comidas. No solo es exponerse a planes, que ya de por si pueden generar tensión. Normalmente éstas personas suelen tener organizados y medidos los planes de cada semana y en Navidades es mucho más probable que surjan más planes y diferentes, lo que les genera agobio por la falta de organización. Es que, además, en estos encuentros la alimentación suele ser protagonista y puede surgir problemas por la ansiedad de sentirse obligados a hacer comidas o “picar” fuera de casa, hacer planes donde no puedan pasar más desapercibidos, etc.
A nivel familiar también surgen complicaciones, el permanecer más tiempo juntos, sin que el trabajo o los estudios nos saquen del contexto familiar, puede llevar consigo la sensación de agobio, consecuencia de estar expuestos a los roces de la convivencia, al reencontrarnos con otros familiares o recordar la pérdida de seres queridos.
Es una etapa de cierre, termina un año, comienza otro, con planes que pueden ser percibidos como rígidos “deberías” que se transforman en sensación de fracaso. Se alteran rutinas, incluso la clínica, que por vacaciones se aparca unas semanas y que generan inquietud e inseguridad.
A nivel cultural, es una etapa de “bombardeo”, enfocado a trasmitir la idea de que si no se controla uno, se coge peso, proliferando más los productos light que sustituyen a los tradicionales y ya se anticipan las dietas para después de las fiestas o incluso para la celebración del día de Año Nuevo.
Llegan también las compras y el agobio al entrar en contacto con las tallas, los modelos y la imagen en general.
En definitiva, para las personas que padecen un TCA es una época especialmente significativa que puede resultar crítica. Es como una exposición masiva a agentes estresores que debemos tener en cuenta todas las personas que interactuamos con un individuo que presenta el trastorno.
Todos estos factores pueden amargarnos unas navidades, o por lo menos, pueden llevarnos a un estado de preocupación que nos impida disfrutar. Y para eso hacemos esta escuela, para poner en común nuestras reflexiones y para resolver las dudas que puedan surgir.
INFORMACIÓN:
FECHA: Viernes 13 de Diciembre
HORA: 19.00h
LUGAR: Sede principal de Instituto Centta en Avda. de la Industria, 4 Ed. 1, Esc. 1, 1ºA Alcobendas – Madrid
Plazas limitadas. Imprescindible reservar plaza en info@centta.es o llamando al 916 61 63 28
Inscripción gratuita.